Olimpo Celta: La Costilla de Adán

OLIMPO CELTA:

 La Costilla de Adán:

O Pindo, puerto pesquero

        Siempre es agradable ascender por las laderas de la montaña a pesar de que cada año los incendios asolan el macizo, pero en esta ocasión esa desgracia facilita la aproximación, aunque sigo prefiriendo llevar encima el machete para abrirme paso a través de las toxeiras, la aproximación nos cuesta cerca de 1 hora, el Macizo de O Pindo es muy pequeño, pero sus desniveles parten desde la misma playa, además es un autentico laberinto en el que hay que buscar un paso entre las rocas durante el ascenso.

        Después de unas cuentas vueltas rodeando enormes bloques graníticos, llegamos a la canal, un corto descanso y a por la primera ruta, tenemos donde elegir, es una zona virgen, todo para nosotros, nos ponemos de acuerdo rápidamente, la cresta de escalones será la primera, sin perder un minuto nos ponemos manos a la obra.

        Es la 2º vez que me acerco a este lugar del Macizo de O Pindo, la primera vez fue durante el descenso del pequeño Barquiño después de la apertura de la vía “O pequeno Saltamontes”, sep-2.008, ya en aquella ocasión queda grabado en mi cabeza varias posibilidades de abrir alguna ruta de escalada deportiva, de hecho ascendemos 2 fisuras que fueron las que nos deja buen sabor de boca y había más posibilidades de nuevas aperturas, fueron rutas de unos 20 metros en fisuras muy típicos de este granito. También me queda en mis recuerdos una línea de escalones que recorría un tramo de pared hasta la cumbre del pequeño montículo adosado al monte O Barquiño.

        Esta línea de escalones tenía aproximadamente unos 2 largos, eso es lo que creí hasta que una vez allí, vi que solo llegaba a los 25 m., un pequeño chasco, pero visto desde justo enfrente todo parece más grande, también pensé que escalarla sería interesante, rápida y fácil, aunque solo escaláramos está solo ya merecía la pena ir y probarla además de pasar el día en el monte. Menos mal que no era más grande, fisuras romas, sin apenas agarres, imposible de colocar seguros, al final tuvimos que entrar desde arriba y descolgarnos para poder hacerlas, aun así hubo que sudarlas, en la ruta La Costilla de Adán, hay un tramo de 2/3 m., que no pudimos hacer nada por ganarle siquiera unos centímetros y hubo que pasar medio colgados.

        Tenía marcada esta ruta desde hace algún tiempo, también la tenía bautizada, así que llevara el nombre del sector, “La costilla de Adán”, también conseguimos escalar otra ruta a su izda., mas fácil, fue un buen comienzo.